El Cerdanet
La alquería de dio origen a un barrio
A las afueras de Mislata existió un pequeño núcleo de casas conocido como el Cerdanet, llamado así por Micer Cerdán de Tallada, un jurista y humanista del siglo XVI considerado precursor del derecho penal moderno.
En su alquería, situada junto a la Cruz Cubierta de Mislata, pasó sus últimos días y falleció en 1614.
Aunque hoy ha desaparecido del paisaje, su historia sigue viva como testimonio de una figura ilustre que dejó huella en la justicia y en la memoria local.
¿Qué era el Cerdanet?
El Cerdanet fue una pequeña agrupación de casas surgidas entre Mislata y Valéncia a finales del siglo XVI o principios del XVII.
Estaba situada junto a la Cruz Cubierta de Mislata, y según el historiador Sanchis Sivera, no pasaba de diez casas, que formaban una especie de de aldea.
El nombre del lugar proviene de Micer Cerdán de Tallada, un jurista valenciano ilustre, dueño de una alquería en esa zona. Su presencia y relevancia fueron tales que la zona tomó su nombre.
A finales del siglo XIX, investigadores como José Rico de Estasen y Gaspar Escolano recopilaron datos sobre este personaje y el lugar donde vivió. También se realizaron excursiones desde Lo Rat Penat para visitar el emplazamiento del Cerdanet y estudiar la vida de Micer Cerdán.
Gracias a esas investigaciones se identificó con más claridad la estructura del antiguo poblado, recopilando información sobre el antiguo horno, las casas adosadas o la alquería del Molino, elementos que formaban parte del núcleo del Cerdanet.
Micer Cerdán de Tallada.
Cerdán de Tallada (nacido en Xàtiva en 1530 y fallecido en Valéncia en 1614) fue jurisconsulto, humanista y escritor, considerado uno de los precursores del derecho penal moderno en España.
Fue autor del célebre tratado "Visita de la Cárcel y de los presos", en el que defiende los derechos y promueve una justicia humana. Por ello, fue conocido como el abogado de los pobres.
Tuvo una vida dedicada al estudio y al servicio público. Fue amigo cercano de los reyes Felipe II y Felipe III, y llegó a ocupar el cargo de regente del Consejo de Aragón.
En los últimos años de su vida, Micer Cerdán residió en su casa del Cerdanet, la Alquería del Molino, situada cerca del camino que iba desde la Cruz Cubierta hasta la Ermita de San Miguel de Soternes. Allí redactó su testamento en septiembre de 1614, y poco después falleció en ese mismo lugar, acompañado por su esposa Jerónima Sancho y rodeado de sus bienes y escritos.
El lugar dependía eclesiásticamente de la parroquia de San Miguel de Soternes, lo que refuerza su relación directa con el territorio de Mislata.
Los últimos deseos de Cerdán reflejan su profunda fe y compromiso con la justicia. En su testamento expresó su voluntad de ser enterrado con sencillez y rodeado de sus seres queridos. Su legado no fue solo jurídico, sino también humano y espiritual: promovió el respeto hacia los presos, la justicia social y el amor al prójimo.
A pesar de su relevancia, el recuerdo de Micer Cerdán se fue desdibujando con los años. Hoy, su figura permanece casi olvidada, y no existe en Mislata ninguna placa o calle que lo conmemore. Sin embargo, su obra y su historia forman parte esencial del pasado local, especialmente en el Barrio de la Cruz, donde vivió y murió.